domingo, 21 de junio de 2009

Tu mirada

A veces, cuando sonrío, no me importa lo guapa o lo fea, lo infantil o lo madura que sea.
Me miras y sonrío, como si fuese una revelación.
Y mi sonrisa anula todas las lágrimas. Y entonces desaparecen todos los enfados, los rencores, las palabras que duelen, las lágrimas, los miedos...

Me miras, y sonrío. Y nazco de nuevo.
Y aquí estoy ante ti. Desnuda. Indefensa. Transparente.

Y a lo mejor, si tu mirada viene de muy, muy adentro, puedes hacerme llorar.
Sencillamente.
Sin dolor.
Sin tristezas.
Sin sentirme vacía o sola.

Y entonces mi sonrisa
se vuelve un arco iris
reflejado en tu mirada.


Hay personas que no creen que una sola alma nacida en el cielo pueda dividirse en dos espíritus gemelos, y precipitarse como estrellas fugaces sobre la Tierra, por encima de océanos y continentes, donde sus fuerzas magnéticas acabarán uniéndose de nuevo en un solo ser.

Pero... ¿de qué otra forma podrías explicar todo esto?
.

1 comentario:

Anónimo dijo...

bellisimo........no tengo mas q decir........cuando algo te hace llorar q mas................