martes, 6 de enero de 2009


2 comentarios:

Anónimo dijo...

La princesa está triste... ¿Qué tendrá la princesa,
que no muestra su risa ni sueña despierta,
que ni sabe qué cosa le produce dolor?
La princesa no sabe que alguien, muy pronto,
llegará a su palacio a dárselo todo:
¡su príncipe azul regalando su amor!

Ana dijo...

La preciosa princesa de la boca de fresa,
hace horas que rie, que se alegra, que sueña,
hace horas que ya se acabó su dolor.
La princesa ya ama, la princesa ya besa,
ella le da la mano y le sonríe al viento:
ahora hay alguien que al fin le regala su amor.